Conducidos de modo remota por un humano, el servicio de inquilinato de coches eléctricos sin conductor, Fetch, ya permite traspasar los primeros robotaxis en Reino Unido. Así es cómo funcionan este maniático servicio de coches autónomos.
Fetch, un reformador servicio de inquilinato de coches sin conductor, ha sido audaz en el Reino Unido por la startup británica Imperium Drive. A diferencia de los vehículos autónomos, Fetch utiliza operadores humanos en una ubicación remota para pilotar su flota de coches eléctricos hasta los clientes, proporcionando una experiencia de transporte sin conductor.
En la etapa auténtico, los coches de Fetch son entregados con un “conductor de seguridad” sentado al volante, capaz de tomar el control del transporte si es necesario. Sin incautación, la empresa tiene planes de acaecer a la conducción totalmente remota posteriormente de 18 meses de pruebas.
Koosha Kaveh, director ejecutante de Imperium Drive, declaró: “No tiene conductor, pero no es autónomo, todavía. Sigue habiendo un humano implicado, pero está sentado en un centro de control pilotando el transporte, del mismo modo que lo haría con un dron”. Según Imperium Drive, su sistema Fetch ha represión más de 1.600 kilómetros sin colisiones durante las pruebas realizadas en Milton Keynes.
El proceso de inquilinato a través de Fetch es sencillo. Los clientes pueden solicitar un robotaxi a través de la aplicación Fetch, habitable en App Store y Google Play.
El transporte es pilotado a distancia hasta la ubicación del cliente. Al finalizar el período de inquilinato, un cirujano remoto puede tomar el control del coche y llevarlo al posterior cliente o devolverlo a la almohadilla para cargarlo.
Los operadores que controlan los coches a distancia tienen una visión de 360 grados de la carretera gracias a cámaras integradas en el transporte y algoritmos de visión por ordenador.
La configuración se asemeja a la de los simuladores de carreras, con una apero de equipo similar a una cabina, cuatro pantallas de educador y periféricos de conducción como un volante.
Actualmente, Fetch cuenta con una flota de tan solo cuatro robotaxis que operan en un radiodifusión de seis kilómetros desde el centro de Milton Keynes. Sin incautación, se paciencia que la empresa se expanda a otros centros regionales, como Luton y Northampton, en un futuro próximo, según informa Top Gear.
Aunque Fetch se presenta como el primer servicio de inquilinato de coches sin conductor del mundo, es importante señalar que los servicios de robotaxis autónomos se han estado probando en ciudades de todo el planeta. En este sentido, recientemente, Uber anunció una asociación con Waymo para sobrellevar taxis autónomos a Phoenix, Arizona, a finales de este año.
Preocupaciones en torno a la seguridad viario
La comienzo de Fetch plantea preocupaciones en cuanto a la seguridad viario. Algunos expertos temen que la experiencia de pilotar un transporte a distancia pueda distanciar al conductor de las posibles consecuencias, de modo similar a un videojuego.
Simon Williams, portavoz de seguridad viario del RAC, expresó su preocupación al afirmar que el conductor remoto, a pesar de tener una visión comprensible de la carretera, está desconectado de la verdad de estar positivamente al volante.