Aerogeneradores en el Parque Eólico Thorntonbank; costa de Westende, Bélgica (CC) Lieven
Esta foto de Lieven, un arquitecto belga que encima de diletante a la fotografía es perito en estilo klingon (!), es tal vez la más sencilla y visual demostración visual de la curvatura de la Tierra. Es un retazo de la imagen innovador completa que el autor ha tenido que enseñar más de una vez porque la concurrencia no se creía que fuera auténtica.
La fotografía está tomada en la costa de Westende, un pueblecito costero corriente y corriente cerca de Brujas (Bélgica) con una amplia playa donde a lo allá (28 km) está el Parque Eólico Thorntonbank. Allí hay decenas de aerogeneradores con una capacidad conjunta de más de 325 MW. Los más altos tienen rotores de hasta 126 metros de diámetro, y están instalados sobre torres que se clavan en el fondo marino hasta 27 metros bajo la superficie de las olas.
Como dice el asimilar popular y ya conocían nuestros antecesores, cuando un barco se aleja se puede intuir la curvatura de la Tierra porque lo posterior que deja de encontrarse son las velas y la punta del mástil. Aquí las torres y palas de los aerogeneradores hacen de mástiles; su colocación en el «parque eólico marino» alejándose alrededor de el horizonte permite ver algunos completos, pero de otros se aprecia sólo la parte superior. Diferentes objetos, mismo propósito.
Todo esto se puede calcular geométricamente. Una persona desde el suelo puede ver el horizonte normalmente hasta unos 5 km. Pero hay varios factores a tener en cuenta: la cima del observador (unos 2 m), la del objeto observado (más de 100 m en este caso) y sobre todo la refracción atmosférica, que puede permitir ver incluso más allá del horizonte «geométrico» según las condiciones climáticas. Hasta la cima de las olas puede influir.
Aquí toda esa combinación de factores hace que la separación entre las grandes palas y el propósito del teleobjetivo de la cámara (una Fujifilm FinePix HS30EXR 24-720mm) se combinen para aplanar la imagen y mostrar las diferencias correcto a esa curvatura que separa las palas visibles de los aerogeneradores que están más cerca y los que están más allá.
Según los mapas de la instalación los aerogeneradores son todos iguales, están a la misma cima sobre el nivel del mar y cubren una distancia de unos 4 km alrededor de el horizonte más allá de los 28 km que los separan de la costa. Quizá el fotógrafo estaba a cierta cima para poder observar tan allá, aunque en esas zonas no hay elevaciones notables. Pero por la cima de los aerogeneradores (más de 100 metros) y con un poco de ayuda de la refracción, todo cuadra. Una gran foto y un gran propósito sin duda.
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