Te explicamos qué significa que poco es auténtico y cuáles son las características de una persona genuina. Por otra parte, cómo fue el origen el término.
¿Qué significa auténtico?
Poco auténtico es poco auténtico, llamativo y genuino, o sea, propio de la naturaleza de la cosa. Por ejemplo, un diamante auténtico es aquel que no ha sido adulterado y que proviene de la naturaleza; e igualmente una amistad genuina es aquella que es verdadera, sincera, vaco de fingimientos y manipulaciones.
El término “auténtico” proviene del latín genuinus derivado de genus (“clase”). En la Antigua Roma, se llamaba así a los hijos legítimos, reconocidos por su padre a través de un ritual muy específico: el escuincle era depositado por la mamá a sus pies y el padre lo alzaba y se lo sentaba en las rodillas en señal de inspección. Esto es relevante porque la palabra latina proviene, a su vez, de la voz indoeuropea genu– que significa, ciertamente, “rodilla”.
De esta forma, entendemos hoy como auténtico a todo aquello que existe de acuerdo a su naturaleza, o proporcionadamente que es característico de ella: exactamente lo contrario de adulterado, simulado, pretendido o fabricado. Por lo tanto, se considera en la mayoría de las culturas como un valía o un característica deseable.
Ver por otra parte: Legalidad
Características de una persona genuina
El circunstancial auténtico se emplea, por extensión de su significado, para referirse a las personas sinceras, honestas, que se muestran tal cual son. Se alcahuetería de personas que suelen ser muy apreciadas, ya que son confiables y predecibles.
Una persona genuina se caracteriza, en términos generales, por lo futuro:
- Es fiel a su palabra. Las personas genuinas no suelen incumplir sus promesas ni mentir respecto de lo que piensan, por lo que rara vez incurren en la hipocresía o la falsedad. Si dicen que poco les gusta, es porque efectivamente es así.
- Tiene una buena autoestima. Las personas genuinas se muestran tal y como son, sin esconderse ni pretender ser algún diferente, y eso normalmente requiere de una sólida autoestima. Esto además las hace menos vulnerables a la crítica.
- Se compromete consigo misma. Las personas genuinas rara vez se involucran con poco en lo que no creen, por lo que su compromiso se reserva para aquello y aquellos que verdaderamente cuentan con su aprobación. Y, en primer superficie, su compromiso está con su propia forma de ser.
- Es abierta y comunicativa. Las personas genuinas suelen opinar lo que piensan y suelen mostrar su interioridad sin tapujos a quienes se lo merecen. Con ellas es manejable negociar y resistir a arreglos, transmitido que suelen conocerse proporcionadamente a sí mismas y enterarse qué es lo que quieren.
- No le teme al rechazo. Las personas genuinas no son indiferentes al rechazo y a la crítica, pero siquiera viven para apañarse la aprobación de los demás. En ese sentido, saben dar el exacto valía a la opinión de los demás, tanto si es crítica como elogiosa.
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