A Zelda solo se juega en una consola de Nintendo. Y no hay más que susurrar… ¿o sí?
El pernio más esperado del año, The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom se pone a la saldo el 12 de mayo, en monopolio para la consola Nintendo Switch. Pero hay miles de personas que tienen pensado jugarlo… en un PC, por medio de un imitador.
Los emuladores siempre caminan por la fina linea que separa la derecho de la piratería, pero el tema es aún más problemático cuando no se alcahuetería de luchar juegos de hace 30 primaveras, sino títulos de extensión de este mismo año.
Existen dos emuladores de Nintendo Switch para PC conveniente avanzados, y de hecho ya circulan algunos vídeos del propio The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom que se ha puesto a la saldo por precoz en algunos sitios, funcionando en estos emuladores.
La polémica de los emuladores de Switch
Para que esto sea posible, es necesario usar una «clave» de la consola Nintendo Switch, que los usuarios extraían con una aplicación citación Lockpick.
Pero su creador ha recibido esta semana un aviso de los abogados de Nintendo: o cierra la app, o acabará en los tribunales. Lo mismo ha ocurrido con el imitador de Switch para Android, Skyline, según explica Wccftech.
De momento los emuladores de Nintendo Switch para PC están a fuera de, porque han sido realizados mediante ingeniería inversa (hacer lo mismo de otra forma, sin copiar), y para muchos países, esta terminología es reglamentario. Pero estos emuladores necesitan las llaves de la consola para hacen funcionar juegos, y sin Lockpick, solo queda acudir a las claves piratas.
¿Es legítimo retar a The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom con un imitador de PC, si has comprado el pernio y la consola?
Para muchos usuarios, eso no es piratear. Pero la sinceridad, y la ley, es diferente. Cuando compras un pernio o una consola firmas incluso un resolución, y ese resolución dice que solo puedes usar el pernio en su consola diferente, y no puedes extraer llaves y ROMs de tu consola para usarla en otro sitio.
Nintendo está en su derecho, amparada por la ley, de perseguir a los que juegan a juegos de Nintendo Switch fuera de su consola. Su pernio más importante desde 2017 está a punto de salir a la saldo, y quiere que todo el mundo lo juegue en la máquina para la que se diseñó. Aunque algunos jugadores no estén de acuerdo.