¿Alguna vez te has imaginado comiendo un cheesecake creado por una impresora 3D? Pues este sueño se ha vuelto ingenuidad gracias a la innovación tecnológica y a la creatividad de un comunidad de investigadores. En un estudio publicado recientemente, se ha revelado que los postres impresos en 3D no solo son posibles, sino que igualmente son deliciosos.
El equipo de científicos, liderado por el profesor Jin-Kyu Rhee de la Universidad Ewha Womans en Corea del Sur, ha desarrollado un proceso para imprimir cheesecakes en 3D. El esquema combina la terminología de la impresión 3D con la ciencia culinaria, lo que permite a los usuarios personalizar el sabor, la textura y el aspecto de sus postres.
El estudio revela que los investigadores utilizaron una impresora 3D de alimentos para crear una pasta a colchoneta de pinrel crema, grasa de coco y agar-agar, un polvo gelificante que se obtiene de las algas. Los ingredientes se mezclaron para formar una tinta comestible, que luego se utilizó en la impresora 3D para elaborar capas y capas del delicioso postre.
Una vez impreso, el cheesecake fue sometido a pruebas de sabor, textura y aprobación por parte de un comunidad de expertos en alimentos y consumidores. Los resultados fueron sorprendentes: el cheesecake impreso en 3D tenía una textura y un sabor muy similares a los de un pastel de pinrel tradicional.
Adicionalmente, la impresión en 3D igualmente permitió a los investigadores personalizar los niveles de potingue y calorías del postre, lo que podría ser una excelente nota para aquellos que buscan disfrutar de un delicioso postre sin preocuparse por su contenido calórico.
Este avance tecnológico no solo nos muestra las infinitas posibilidades de la impresión 3D en la industria alimentaria, sino que igualmente nos acerca a un futuro en el que los alimentos personalizados y adaptados a nuestras micción específicas podrían ser poco global en nuestra vida diaria.
A medida que la impresión 3D siga evolucionando, es probable que veamos más innovaciones culinarias que transformen la forma en que preparamos y consumimos alimentos. Mientras tanto, la próxima vez que disfrutes de un cheesecake, quizás quieras preguntarte si fue creado por una impresora 3D.
Fuente:
Studyfinds